Todo se basa en devolver competencias sanitarias al estado
Sin copago, troncalidad y modernizar la asistencia
UPyD incide de forma especial en los pocos beneficios que aportaría el copago sanitario. Además, rompe una lanza a favor de la troncalidad, asumiendo que será difícil en algunas especialidades, y propugna un mayor acercamiento entre la atención primaria y la especializada.
Laura Pérez. Málaga | 20/03/2012 00:00
La devolución al Estado de las competencias en Sanidad, según los responsables de UPyD, "no es tanto por una cuestión económica como de derechos", que asegure que los servicios se apliquen en todo el Estado sin discriminaciones, con una carta única de servicios y una única tarjeta sanitaria; que no haya dificultades en financiar terapias caras (como quimio o inmunosupresores), que no obligue a los pacientes a desplazarse a su comunidad de origen para proveerse de medicamentos, que haya una única historia y expresada en castellano y que haya un único programa de vacunaciones. "No obstante, qué duda cabe que también tiene repercusiones económicas al centralizarse las compras y poder trabajar con precios más bajos", ha explicado José María Gutiérrez Megías, farmacéutico y coordinador de salud de UPyD en Andalucía.
El copago no es planteable mientras se siga gestionando mal el sistema, ha afirmado: "Hay que evitar su aplicación indiscriminada porque es ineficaz e injusto, salvo para situaciones concretas". Cuando se habla de copago "no es por mejorar la eficiencia económica del sistema sino porque la sanidad está crónicamente subfinanciada". En su opinión, en España "no es que tengamos una cobertura del cien por cien; es mucho mayor y sin límites definidos, por irresponsabilidad políticas de los gobiernos que hemos tenido desde que se hizo el informe Abril en los años 90".
Las alternativas al copago, aparte de incrementar la financiación actual, suponen cambiar el modelo, según UPyD. Con la rebaja del precio de los medicamentos (de promedio un 50 por ciento), la deuda a las multinacionales "está tensionando en demasía al sistema". En relación con la primaria, para reducir la frecuentación del nivel secundario y hospitalario "hay que facilitar la comunicación y colaboración entre ambos niveles". Dos posibles soluciones son generalizar y extender los programas de prevención y hacer que las directrices que se aplican en primaria también se den en especializada. "No debe olvidarse incidir en incentivos en ambos niveles, además de establecer la posibilidad de libre elección de especialista colaborador por parte del médico del primer nivel".
El programa de UPyD hace referencia a un nuevo modelo de oficina de farmacia: "Queremos una ley de mínimos en cuanto a la apertura de nuevas oficinas de farmacia similar a la ley de ordenación farmacéutica de Navarra, estableciendo unos baremos en cuanto a población y distancia entre oficinas de farmacia más reducidos que los actuales 250 metros y una población mínima de 2.800 habitantes".
En referencia a las especialidades, "hay una ventaja que es obvia: con la troncalidad se evitaría, en gran medida, la recirculación de residentes que tras elegir una especialidad la abandonan para probar suerte en otra", ha explicado Gutiérrez Megías. Esta filosofía "es acertada, aunque somos conscientes de que puede ser de compleja aplicación a todas las especialidades, dado que algunas son tan específicas que difícilmente pueden quedar integrada en un tronco".
La e-salud también tiene protagonismo en el programa de UPyD. Incorporar los avances en nuevas tecnologías y en sistemas de información, "con un notable incremento productivo y de aprovechamiento racional de los recursos existentes sin sobrecoste perceptible", es una de sus principales sugerencias.
El paciente merece, según el partido de Rosa Díez, más ventajas administrativas y mejoras en la atención: "Queremos modernizar la parte asistencial con medidas como la consulta por video conferencia, sustituir recetas manuscritas por la grabación en las tarjetas sanitarias, aumentar el número de novedades tecnológicas e incidir el la formación de profesionales en la cirugía robótica".
- Cuando se habla de copago no es por mejorar la eficiencia económica sino porque la sanidad está crónicamente subfinanciada
El copago no es planteable mientras se siga gestionando mal el sistema, ha afirmado: "Hay que evitar su aplicación indiscriminada porque es ineficaz e injusto, salvo para situaciones concretas". Cuando se habla de copago "no es por mejorar la eficiencia económica del sistema sino porque la sanidad está crónicamente subfinanciada". En su opinión, en España "no es que tengamos una cobertura del cien por cien; es mucho mayor y sin límites definidos, por irresponsabilidad políticas de los gobiernos que hemos tenido desde que se hizo el informe Abril en los años 90".
Las alternativas al copago, aparte de incrementar la financiación actual, suponen cambiar el modelo, según UPyD. Con la rebaja del precio de los medicamentos (de promedio un 50 por ciento), la deuda a las multinacionales "está tensionando en demasía al sistema". En relación con la primaria, para reducir la frecuentación del nivel secundario y hospitalario "hay que facilitar la comunicación y colaboración entre ambos niveles". Dos posibles soluciones son generalizar y extender los programas de prevención y hacer que las directrices que se aplican en primaria también se den en especializada. "No debe olvidarse incidir en incentivos en ambos niveles, además de establecer la posibilidad de libre elección de especialista colaborador por parte del médico del primer nivel".
El programa de UPyD hace referencia a un nuevo modelo de oficina de farmacia: "Queremos una ley de mínimos en cuanto a la apertura de nuevas oficinas de farmacia similar a la ley de ordenación farmacéutica de Navarra, estableciendo unos baremos en cuanto a población y distancia entre oficinas de farmacia más reducidos que los actuales 250 metros y una población mínima de 2.800 habitantes".
- La filosofía de la troncalidad es acertada, aunque somos conscientes de que puede ser de difícil aplicación a todas las especialidades
En referencia a las especialidades, "hay una ventaja que es obvia: con la troncalidad se evitaría, en gran medida, la recirculación de residentes que tras elegir una especialidad la abandonan para probar suerte en otra", ha explicado Gutiérrez Megías. Esta filosofía "es acertada, aunque somos conscientes de que puede ser de compleja aplicación a todas las especialidades, dado que algunas son tan específicas que difícilmente pueden quedar integrada en un tronco".
La e-salud también tiene protagonismo en el programa de UPyD. Incorporar los avances en nuevas tecnologías y en sistemas de información, "con un notable incremento productivo y de aprovechamiento racional de los recursos existentes sin sobrecoste perceptible", es una de sus principales sugerencias.
El paciente merece, según el partido de Rosa Díez, más ventajas administrativas y mejoras en la atención: "Queremos modernizar la parte asistencial con medidas como la consulta por video conferencia, sustituir recetas manuscritas por la grabación en las tarjetas sanitarias, aumentar el número de novedades tecnológicas e incidir el la formación de profesionales en la cirugía robótica".
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