Buscando hermanos entre códigos genéticos

En EE.UU. un registro conectó a 150 "parientes"

El año pasado, el diario The New York Times relató la historia de Cynthia Daily, una mujer que junto con su marido concibieron un hijo a través de un donante de esperma. Ellos tenían la esperanza de que, algún día, su hijo pudiera conocer algo acerca de la historia de sus "hermanos".

Entonces, la mujer se registró en un sitio web para buscar a otros niños que hubieran nacido del mismo
donante y, luego, poder localizarlos. Con los años, el número de chicos que integraban el grupo fue creciendo más y más. Finalmente, y mediante la identificación de un código asignado a cada donante (ya que la donación en Estados Unidos también es anónima), la mujer localizó a 150 niños, todos concebidos con el esperma de un mismo hombre.

"Al aumentar el número de mujeres solteras que eligen tener hijos, sumado a la mayor cantidad de niños que año tras año nacen gracias a los tratamientos de inseminación artificial, grandes grupos de medios hermanos, hijos del mismo donante, comenzaron a formarse", explicaba el artículo, publicado el 5 de septiembre del año pasado.

El grupo de Cynthia Daily, según confirma la nota de The New York Times, está entre los más numerosos de todo el país, pero muchos otros grupos lograron reunir 50 o más medios hermanos, que coparon la Web e invadieron los chats norteamericanos dedicados a la temática.

Las madres de hijos de donantes pueden reportar en forma voluntaria el nacimiento del niño en el banco de esperma, pero sólo entre el 20 y el 40 por ciento lo hace. Por eso, Wendy Kramer, cuyo hijo, Ryan, fue concebido por donación de esperma, creó en 2000 el registro de medios hermanos hijos de donantes (Donor Sibling Registry). "Los expertos no hablan de este tema cuando asesoran a las parejas en temas de infertilidad. Necesitamos regulación. ¿Qué significa la familia para estos niños?", se cuestiona Kramer.

Según la doctora Debora Spar, presidenta del Barnard College y autora del libro El negocio de los bebes: cómo el dinero, la ciencia y la política manejan el comercio de la concepción , "se tienen más reglas para comprar un auto usado que cuando se compra un esperma de donante. Las leyes en la industria de la fertilidad no existen".

"Si bien en otros países se limita la cantidad de hijos concebidos por el mismo donante, no existe tal límite en los Estados Unidos. La Sociedad Americana de Medicina Reproductiva recomienda restringir las concepciones: el esperma de un mismo donante puede utilizarse en 25 pacientes cada 800.000 habitantes. Así, dicen los expertos, se evitaría la consanguinidad..