Los recortes hacen caer por primera vez la inversión en I+D farmacéutica

Estaba cantado, dirán muchos. Mucho ha tardado, dirán otros. El caso es que la desaceleración del gasto en I+D por parte de la industria farmacéutica ha sido evidente en la última década y, finalmente, ha culminado con lo que se temía: la primera caída del gasto en los últimos ocho años, concretamente un 5,3 por ciento menos frente a 2010.

José A. Plaza | 24/09/2012 14:32

La patronal, Farmaindustria, justifica el descenso en la inversión en I+D farmacéutica por "los fuertes ajustes que está sufriendo el mercado, que afectan el esfuerzo de las compañías en I+D". Hay que remontarse a las cifras de 2007 y 2008 para acercarse a lo que invirtieron los laboratorios el año pasado. Si hace cinco años el gasto en I+D fue de 922.061 euros y hace cuatro de 1.010.131, en 2011 se situó en 974.653, lo que supone en 5,3 por ciento menos que en 2010. Es la primera vez desde 2007 que baja de los mil millones de euros. Las medidas de contención del gasto farmacéutico adoptadas por el Gobierno en los dos últimos años están haciendo mella; el baile de cifras deja una sensación de desaliento a la que la industria ya se está acostumbrando.

De los 974 millones invertidos en I+D por los asociados de Farmaindustria en 2011, casi la mitad, 470, se destinaron a la inversión en ensayos clínicos, mientras que más de 137 millones de euros recayeron en la investigación básica.

La investigación clínica, en auge
El año pasado se confirmó otra tendencia. Si en 2010 Diario Médico público que el gasto en ensayos se había duplicado en siete años (ver DM del 10-XII-2010), en 2011 se refrendan estos datos (con una ligerísima desaceleración), con un aumento de la inversión en investigación clínica del 82 por ciento en los últimos 8 años, pasando de 258 millones de euros en 2003 a los 470 millones de euros del pasado ejercicio.

Otro dato. El 43 por ciento de la inversión total en I+D se dedicó a contratos de investigación con hospitales, universidades y centros públicos (lo que se denomina I+D extramuros), mientras que los gastos internos (intramuros) ascendieron a 559 millones de euros. El desequilibrio clásico entre autonomías, con Madrid y Cataluña mandando muy por encima del resto, sigue en pie: de los 559 millones, el 49,3 por ciento se invirtieron en Cataluña y el 38,7 por ciento en Madrid. El resto de autonomías y las inversiones en el extranjero se reparten un pequeño trozo de la tarta, llevándose sólo el 12 por ciento restante.