La ausencia de acuerdo y el temor a otro modelo de gestión

La imposición unilateral de la jornada y el miedo a una creciente externalización de los pacientes centran buena parte de las críticas de los responsables hospitalarios de la comunidad. Eduardo Lobo, jefe de Cirugía General del Ramón y Cajal, se queja de que las instrucciones "no tienen en cuenta la realidad de los servicios y su aplicación es tan heterogénea como injusta".

F. Goiri | fjgoiri@diariomedico.com | 18/02/2013 00:00

Carmen Soto, del Clínico, dice que "ningún facultativo, ningún jefe de servicio, y casi diría que ninguna gerencia han podido opinar". Ante eso, Resino replica que las instrucciones "se negociaron tanto en la Mesa General como en la sectorial. En 2012, siendo muy similares, se firmaron con los sindicatos profesionales después de obtener dos contrapartidas: una OPE de casi 3.500 plazas y la garantía de que se respetarían todos los contratos hasta el 31 de diciembre. Puede que la ausencia de contrapartidas y el contexto de conflictividad actual hayan impedido el acuerdo este año".

Juego lucrativo
Ángel Esteban, del Gregorio Marañón, denuncia que "el aumento de la externalización responde a un juego muy claro y muy lucrativo para la privada", mientras Santiago Moreno, del Ramón y Cajal, habla a las claras de "un detrimento de lo público en favor de lo privado que acabará vaciando de contenido los grandes hospitales". Resino niega categóricamente que "vayamos en la línea de externalizar la actividad quirúrgica, sino todo lo contrario: aprovechar los recursos públicos que tenemos y hacerlos más eficientes".