“Que la Sanidad española era universal era un mito”, afirma Rubén Moreno

Madrid (22-24/03/2014) - Silvia C. Carpallo

El portavoz de la Comisión de Sanidad del Grupo Popular era el encargado de presidir la presentación de la asociación "Nueva Gestión en Sanidad" (NUGESAN), en la cual explicaba que "la universalidad no puede ser como pretenden ciertos grupos políticos, simplemente porque no se puede pagar", además de abordar otros temas como los ajustes en Sanidad, la promoción de la salud, o la necesidad de reformar los modelos de gestión clínica

El concepto de universalidad es una de las grandes discrepancias entre el grupo popular y el grupo socialista en la comisión de Sanidad, y es por ello que Rubén Moreno, portavoz de la Comisión de Sanidad del Grupo Popular, quiso aprovechar el foro de la presentación de la asociación "Nueva Gestión en Sanidad" (NUGESAN), para aclarar algunos conceptos.

El primero era que "la universalidad no puede ser como pretenden ciertos grupos políticos, simplemente porque no se puede pagar", razón por la cual el RDL 16/2012 tuvo que redefinir la situación de los asegurados. Pese a ello, recordaba que la afirmación de "que la Sanidad española era universal era un mito", y no ha sido hasta 2012 cuando esto realmente ha sido así, en su opinión. Lo justificaba explicando que gracias a esta nueva normativa están asegurados aquellos que estén adscritos a la seguridad social como trabajadores, los pensionistas, o aquellos que cobren algún tipo de subsidio o prestación, pero que además lo están por primera vez los parados de larga duración, que era uno de los grandes problemas a resolver. Todos los demás, españoles o residentes, tienen derecho a la cobertura por la residencia, excepto aquellos con una renta superior a 100.000 euros, cuando antes estaban incluso excluidos aquellos que tenían rentas iguales al salario mínimo interprofesional. "Ningún país europeo tiene la misma cobertura que tiene España, y eso que no somos de los países más ricos". El problema, por tanto, es que en el debate político sanitario "sobra pasión y falta rigor e información", para abordar este tipo de cuestiones.

Si bien explicaba que 2012 fue el año de los ajustes, 2013 de las reformas y 2014 va a ser el año de la recuperación, si citaba que en el caso de la Sanidad fue una excepción, ya que la situación necesitó hacer paralelas todas las medidas, ante una importante deuda sanitaria. Así, en cuanto a los ajustes, Moreno recordaba que el gasto farmacéutico en Europa rondaba el 15 por ciento mientras que en España era de un 19, y el porcentaje de genéticos estaba en un 33 cuando en la UE oscilaba entre el 50 y el 60, "y esto había que corregirlo". En cuanto a otras cuestiones, como el copago hospitalario, insistía en que no se trataba de una medida recaudatoria, sino de equidad entre territorios, y que ante la respuesta de que es más caro crear el sistema de cobros que lo que se puede llegar a recaudar, alegaba que "el sistema de facturación hospitalaria tenía que estar establecido desde ya", puesto que deben ser los hospitales quienes facturen no sólo este copago, sino por ejemplo la atención a extranjeros a sus respectivos países.

No eran los únicos temas de relevancia que exponía Rubén Moreno. Citaba otros tan importantes como la necesidad de trabajar en la promoción de la salud, puesto que "si logramos educar a la población infantil en educación para la salud, lo notará el sistema", o la importancia de seguir avanzando en la gestión clínica, matizando que en lo referente a las Unidades de Gestión Clínica "si no las modificas necesitarás más financiación, por lo que habrá que darle una pensada", para la cual "hay que conseguir implicar a los profesionales, y para eso hay que motivarlos". Por último, concluía reflexionando que "la tensión presupuestaria va a obligar por necesidad y no por ley a ponerse de acuerdo a las Comunidades Autónomas".

Nuevas ideas en gestión

Diego López Llorente, presidente de NUGESAN, era el encargado de presentar los pilares de esta nueva asociación, que nace de la Escuela de Negocios de la Universidad San Pablo CEU, a través del máster que Tassica y la Universidad pusieron en marcha. Así, su línea clave es la de apostar por "ideas jóvenes y frescas", en contra de la irresponsable posición de "apalancamiento" actual.

Para ello insistían en que la implantación de nuevos dispositivos tecnológicos, el coste de los fármacos innovadores, el cambio de la pirámide poblacional o el aumento de pacientes crónicos, suponen un aumento del gasto sanitario que no se puede ignorar. En contrapartida proponían "una mayor evaluación de nuestros centros en índices económicos y de calidad", así como "ser más trasparentes, para encontrar las debilidades y amenazas, para erradicarla", y los puntos fuertes para impulsarlos. Recordando igualmente que en muchas ocasiones el propio médico aún desconoce los costes de los procedimientos o de los fármacos. Para todo ello, al igual que en el caso de la Sociedad Española de Directivos Sanitarios (SEDISA), de la cual han recibido plena colaboración, uno de sus principales objetivos es "la profesionalización de los directivos de la salud y el reducir la burocracia de los grandes centros".