Roche sigue invirtiendo 30 millones anuales en su centro TIC de Madrid

Da soporte dentro de la compañía a 110.000 usuarios de 140 países. Las tecnologías ayudan a manejar megabases de datos científicas.

Cristina G. Real. Madrid | cgr@unidadeditorial.es | 03/03/2014 00:00

Ken Wilcox dirige la división de Pharma Informatics de Roche. (DM)

VISTA:

El Centro de Excelencia Informática que la multinacional suiza Roche tiene en Madrid ha alcanzado ya los 500 empleados que dan soporte a más de 110.000 usuarios de 140 países -incluidos los centros de datos globales de la compañía en Suiza, Alemania, Estados Unidos, China y Singapur- y crece a un ritmo de 40 a 60 nuevas incorporaciones cada año. Ken Wilcox, máximo responsable de Pharma Informatics de Roche, ha explicado a DM que la compañía prevé mantener su inversión actual de 30 millones de euros anuales en él. "El centro -que comenzó a operar en 2003 con una plantilla inicial de 33 personas- juega un papel crítico en las infraestructuras TIC de Roche, y ha generado expertos en el diseño, ingeniería e implementación de soluciones para todos los procesos, incluida la investigación básica y el desarrollo clínico".

Ciencia básica y tecnología son dos campos que inicialmente pueden parecer distantes porque manejan idiomas diferentes, pero Wilcox sostiene que la interacción de ambos es importante por la gran cantidad de información que generan la ciencia y la biotecnología. "Se manejan megabases de datos que necesitan de la tecnología para poder sacar conclusiones, hacer y responder a preguntas que de otro modo tardaríamos años en plantearnos". En los procesos de I+D es un problema manejar las grandes cantidades de información disponibles internamente en las compañías, y la tecnología permite gestionar mucho mejor esa información, "e incluso cruzarla con datos reales de la práctica clínica e información que médicos y pacientes comparten con todo el mundo en bases de datos públicas, como 23andMe. Exploramos todas las opciones posibles gracias a las TIC desde las instalaciones de Madrid".

No sólo hay que seleccionar personal altamente cualificado en TIC; además, cualquiera que entra en Roche debe formarse para conocer lo que la compañía aporta"

Wilcox reconoce que funciones como las que se llevan a cabo en el Centro de Excelencia Informática de Madrid se han externalizado en muchas farmacéuticas, y que Roche estudió el valor estratégico de ambas alternativas y optó por desarrollarlas internamente. "Supone un coste superior, pero también un valor añadido, no sólo por tener personal interno que conozca y sea capaz de aplicar las TIC a todos los procesos, sino también por la preservación de información altamente delicada y confidencial en muchos casos".

Formación científica
Con todo, no se trata de seleccionar personal altamente cualificado en TIC, sin más; además, "cualquiera que entra en Roche, sea cual sea su función, debe formarse para conocer y valorar lo que la compañía aporta científicamente y a los pacientes".

El reto de futuro para Wilcox es "mantenerse al día en el conocimiento y las demandas de un negocio siempre creciente como el de Roche", señala en alusión al progreso científico que da lugar a nuevos desarrollos. "El mundo en el que opera Roche es cada vez más complejo". Ejemplo de ello es el área de oncología, donde tiene mayor presencia, y en la que "los datos crecen a un ritmo enorme" y la tecnología contribuye, por ejemplo, a valorar el impacto de respuestas a compuestos y llevarlas a una mayor escala y a identificar mucho más rápido a pacientes candidatos a participar en un ensayo clínico".