lunes, 15 de junio de 2015

Condena por sufrimiento fetal con una pésima HC - DiarioMedico.com

Condena por sufrimiento fetal con una pésima HC - DiarioMedico.com



INDEMNIZACIÓN DE 250.000 EUROS

Condena por sufrimiento fetal con una pésima HC

La Audiencia Nacional recrimina a una clínica que no conste documentación sobre "monitorización cronológica del parto, ni su evolución ni indicaciones".
Diego Carrasco. Madrid | diego.carrasco@diariomedico.com   |  15/06/2015 00:00
 
 
La Ley de Autonomía del Paciente dedica un capítulo entero a la historia clínica (HC) consciente del importante valor que tiene dicho documento en el proceso asistencial de un enfermo, tanto por su contenido informativo como por ser uno de los principales derechos del paciente. Por ello cuando en un proceso judicial no consta la historia clínica, los tribunales consideran que se ha vulnerado la lex artis.
La Audiencia Nacional ha condenado a una clínica a pagar una indemnización de 250.000 euros a los padres de un bebé por los daños y secuelas que sufrió como consecuencia de un sufrimiento fetal. En dicha cuantía también está incluido el daño moral sufrido por los progenitores. La sentencia reprocha al cuadro médico de la clínica que no constara en la HC documentos tan importantes como "la evolución del parto, indicaciones, tratamientos, si se administraron dosis y situación clínica del feto y de la madre".
Y es que "los recurrentes tienen derecho a tener una historia clínica completa de lo acontecido durante el parto", subraya el fallo. Todos los peritos de las partes, incluído el judicial, explicaron que ante un parto que inicialmente era normal, con un feto que no tenía ninguna anomalía, nació un bebé inválido afectado de una parálisis cerebral de carácter cuadrapléjica.
El tribunal ha resuelto la demanda presentada por Emiliano Rubio, experto en Derecho Sanitario y abogado de la familia reclamante, contra un centro privado y su aseguradora, por mala praxis en la asistencia a un parto. La paciente, embarazada de 38 semanas y seis días, acudió a la consulta de su ginecólogo. Tras explorarla le comunicó que el momento del parto había llegado y que el corazón del feto latía con normalidad. Eso sí, advirtió a la madre de que la cabeza del niño era grande. Sin más explicaciones la remitió a una clínica privada de su seguro.
  • La Sala Contenciosa establece una indemnización de 250.000 euros por las gravísimas secuelas que le quedaron al recién nacido, que 17 años más tarde falleció
Sin oxígeno
Nada más ingresar fue monitorizada. Todo era normal. Cuando llevaba un cuarto de hora realizando ejercicios de respiración se produjo la rotura de la bolsa amniótica con aguas claras. La matrona se dio cuenta de que había una desproporción entre el tamaño fetal y el canal de salida. Ante esta situación se intentó la maniobra de Kristeller y una ventosa, que no dieron resultado.
El ginecólogo decidió entonces practicar una cesárea y el bebé nació tras sufrimiento fetal. El test de Apgar dio un resultado de 3/5 con gran distress respiratorio y no respondía a la reanimación. El médico ordenó el traslado a un hospital público, pero se hizo con "excesiva dilación" porque no existía ambulancia en el centro. El bebé estuvo cuarenta minutos sin oxígeno hasta que llegó el vehículo. Pero su fatalidad no quedó ahí. La ambulancia que le transportó al hospital no estaba preparada para este tipo de situaciones. Cuando ingresó el bebé su diagnóstico fue de "asfixia perinatal, encefalopatía hipóxico isquémica y crisis convulsivas". Como consecuencia de dicho estado el menor sufrió daños y secuelas muy graves.
Dudas sin resolver
La Audiencia Nacional considera que, tras las pruebas practicadas, "los peritos dejaron claro que se había conculcado la lex artis". Además, no está acreditado que "se utilizaran todos los medios disponibles por la ciencia para evitar el sufrimiento fetal". Y es que nadie se explicó cómo ante un parto normal con un desarrollo normal se acabó con una cesárea que no estaba programada y con un bebé paralítico.
  • El bebé padeció una parálisis cerebral con tetraparesia mixta sin control postural y sin poder hablar ni andar ni poder coger cosas, afectación auditiva e incontinencia fecal
La duda persistirá para siempre porque en la HC no se ha recogido qué es lo que pasó realmente para que no se detectara el sufrimiento fetal. El tribunal explica que "la ausencia de historia clínica no contraviene sólo la buena praxis clínica sino también el derecho de información de los familiares a saber qué pasó aquel fatídico día".
En este sentido, los magistrados de la Sala de lo Contencioso-administratvo consideran que con "la nula información aportada es imposible conocer qué sucedió durante el periodo expulsivo, pero todo parece indicar que la anoxia y la encefalopatía hipóxico isquémica pudo tener su origen en dicha fase del parto". El niño falleció a los 17 años de edad y la sentencia, para fijar la indemnización, ha tenido en cuenta "el calvario" que los familiares han padecido durante muchos años.

Graves omisiones

El TSJ de Madrid condenó a la Consejería de Sanidad de Madrid por una HC mal confeccionada al no tener en cuenta datos que eran muy importantes. La Audiencia Nacional impuso 300.000 euros a un hospital por "omitir datos relevantes en la HC", como la gráfica de anestesia, entre otras cuestiones.

No hay comentarios: