Aumentan las enfermedades mentales entre los médicos

Un 69,5 por ciento de los pacientes atendidos en el Paime sufren alguna patología mental. Las adicciones, que eran la causa principal de consulta al inicio, ahora están bajando.

Karla Islas Pieck. Barcelona | karla.islas@diariomedico.com | 18/04/2016 00:00

Antoni Calvo López, director de la Fundación Galatea. (Jaume Cosialls)

El 69,5 por ciento de los profesionales atendidos por parte del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (Paime) están afectados por un trastorno mental, mientras que un 19,5 por ciento presenta un problema de abuso del alcohol y un 11 por ciento, a otras sustancias tóxicas, según datos de 2015.

El responsable de este programa en el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona (COMB) y director de la Fundación Galatea -centro de referencia en España para la atención y promoción de la salud de estos profesionales-, Antoni Calvo, ha detallado que en los últimos años se ha notado un cambio en la tendencia de las causas que motivan la atención de estos médicos, así como en la edad de inicio. "Nos preocupa en especial la salud de los médicos residentes, ya que estamos notando que ha habido un incremento de casos entre los profesionales más jóvenes".

En los inicios del Paime, era más frecuente atender adicciones, pero ahora "han pasado a un segundo plano" mientras que las patologías psiquiátricas cobran más importancia. También se está notando un incremento de pacientes femeninas, que ya representan un 46 por ciento del total, "y seguramente está proporción aumentará en los próximos años, ya que la profesión se está feminizando cada vez más".

Calvo recuerda que el Paime nació como una iniciativa del COMB, en el año 1998, con el objetivo no sólo de velar por la salud mental de los colegiados, sino también para garantizar la buena práxis y la seguridad de los pacientes. Se trata de una iniciativa que en su día fue pionera en Europa. Hace dos décadas sólo había experiencias similares en países como Estados Unidos, Australia o Nueva Zelanda.

El Paime ha atendido, desde sus inicios, a 2.293 pacientes, de los cuales el 85 por ciento acudieron de manera voluntaria y el resto por comunicación, demanda o denuncia.

"La diferencia es que los programas que existían entonces eran más de carácter punitivo y el Paime nació con el objetivo de diagnosticar y tratar a los médicos con problemas mentales y/o adicciones,para ayudarles a reincorporarse a sus labores profesionales, o bien, acompañarlos en el camino hacia la incapacidad permanente".

Dos años más tarde, este programa se extendió al resto de España con la creación de una red de profesionalesque trabajan en colaboración con los colegios provinciales.

En estos 18 años, el Paime ha atendido a 2.293 pacientes, de los cuales el 85 por ciento acudieron de manera voluntaria, el 10 por ciento por demanda inducida, el 4 por ciento por comunicación confidencial y el 1 por ciento por una denuncia.
En total, en este periodo se han realizado un total de 1.706 ingresos hospitalarios en el centro asistencial de la Fundación Galatea, ubicado en la ciudad de Barcelona. Se trata de un centro monográfico "en el que nuestra prioridad es garantizar la calidad de la atención y la confidencialidad de los profesionales".

Una red en expansión
La Fundación Galatea ha colaborado con la Fundación Patronato de Huérfanos y Protección Social de Médicos Príncipe de Asturias (Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial) en la elaboración de los criterios de acreditación que deben cumplir los centros que colaboran con la red Paime.
Hasta ahora no se habían abierto más centros asistenciales de este tipo, "en parte, creemos, por el elevado coste que suponen estas unidades", explica Calvo a Diario Médico.

Actualmente el importe de la atención de los enfermos está cubierto por las administraciones sanitarias autonómicas (el CatSalut en el caso de Cataluña) y por los colegios de médicos provinciales y la OMC.

Según su director, la Fundación Galatea tiene capacidad suficiente para atender de manera adecuada la demanda actual, pero considera positivo que existan más opciones asistenciales en la red Paime.

"No nos preocupa perder pacientes porque nos avalan casi dos décadas de experiencia y nuestros profesionales tienen una gran destreza para atender a estos pacientes". Para él, entre los elementos diferenciadores de su centro asistencial destaca su método para garantizar la confidencialidad, que es uno de sus grandes valores.

A su juicio, es muy importante que los nuevos centros que tengan intención de sumarse a la red de proveedores del Paime y se acrediten puedan garantizar de forma adecuada el anonimato y la intimidad a todos los médicos enfermos que acuden para ser atendidos y que esto se pueda evaluar de forma periódica. "Creemos, además, que lo ideal es que los centros sean monográficos y estén situados en un edificio independiente de otros centros asistenciales ajenos al Paime".