lunes, 12 de diciembre de 2016

Texas obligará a enterrar los restos del aborto provocado - DiarioMedico.com

ENTRARÁ EN VIGOR EL 19 DE DICIEMBRE

Texas obligará a enterrar los restos del aborto provocado

El Estado de Texas cambiará la legislación para que los restos fetales no sean tratados como los demás residuos biológicos. A partir del 19 de diciembre será obligatorio su enterramiento para proteger la salud pública y reconocer la dignidad del no nacido.
G.E. Madrid   |  12/12/2016 13:37
 
 
El Estado de Texas está a punto de aprobar una nueva regulación preparada por elDepartamento de Servicios de Salud que cambia la manera en que se tratará el tejido fetal derivado de un aborto llevado a cabo en una clínica, hospital o cualquier otro centro sanitario.
Si hasta ahora los restos fetales se trataban como los demás residuos biológicos, desechándolos en contenedores especiales homologados, las nuevas normas exigirán su entierro, con independencia de la etapa de la gestación en la que se haya provocado el aborto.
La modificación se lleva a cabo -expresa la propia norma, que entrará en vigor el 19 de diciembre, para "proteger la salud pública de una forma acorde con el respeto del Estado hacia la vida y la dignidad del no nacido".
Un portavoz del Gobierno estatal ha enfatizado que "los restos humanos y fetales no deben tratarse como residuos médicos; la nueva normativa afirma, en este sentido, el valor y dignidad de toda vida. Es imperativo fijar estándares que reflejen el respeto a la santidad de la vida".
La obligación del entierro recaerá sobre el centro sanitario y no sobre la madre. Además, no será preciso emitir certificado de nacimiento o muerte. La norma tampoco se aplicará a abortos espontáneos. Grupos partidarios del aborto han criticado la medida afirmando que estigmatizará a la persona que se somete a un aborto y generará un coste adicional elevado que los centros donde se realiza esta práctica trasladarán a las mujeres, dificultando así el acceso a la interrupción del embarazo.
La Comisión de Sanidad, encargada de elaborar la norma, ha respondido que "la medida impone obligaciones a las instituciones sanitarias, no a las mujeres, por lo que difícilmente se creará un estigma. Además, la estimación de los costes que entraña el nuevo marco revela que son lo suficientemente bajos como para que puedan ser absorbidos por el presupuesto operativo de las instituciones al tiempo que se asegura una adecuada disposición de los restos fetales".

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