martes, 26 de septiembre de 2017

Más de la mitad de los cánceres seguirán siendo mortales en 2030

Más de la mitad de los cánceres seguirán siendo mortales en 2030



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Más de la mitad de los cánceres seguirán siendo mortales en 2030

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A pesar de que la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) considera esperanzador que, en la actualidad, la tasa de supervivencia en cáncer sea del 50%, sus previsiones para 2030 hablan de 21, 7 millones de casos nuevos en el mundo, de los que 13 millones tendrán desenlace fatal.
Este viernes, 22 de septiembre, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) entregó sus ayudas a la investigación en esta patología correspondientes a 2017, contando con la participación de la Casa Real y la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación del Ministerio de Economía y Competitividad (I+D+i). El acto se desarrolló en el auditorio del Museo del Prado, dos días antes del "Día Mundial de la investigación contra el cáncer", momento en que se bautizó como "Plaza de la Investigación" la Plaza de Sánchez Bustillo de Madrid, contigua al Museo Naciocial Centro de Arte Reina Sofía (CARS) y donde voluntarios y población general realizaron un gran mosaico electrónico en apoyo a los investigadores.
Pie de foto: Mosaico junto al Museo Reina Sofía (AECC)
Al tiempo se presentó a nivel mundial una campaña con el lema "Fort he future of cáncer research, don´t stand still. We won´… Make Your move", verdadero grito para la movilización de la gente a favor de la ciencia investigadora. Dado que existe un cálculo, según el cual, si la investigación se detuviera ahora mismo, en el año 2030 moría una persona por cáncer cada 3,5 minutos.
Las referidas ayudas a la investigación oncológica tienen como objetivo principal aumentar en un 15% la supervivencia en cáncer a través de proyectos realmente innovadores. En concreto, se trata de 140 ayudas cuyo importe total ascendió estos años a 40 millones de euros.
Pie de foto: Ignacio Muñoz (AECC)
Durante su discurso, Ignacio Muñoz, presidente de la AECC, aseveró que ir a Houton (Texas, EEUU) para un ciudadano que vive en España y recibe un diagnóstico de cáncer no es una opción, pero que sí lo es acudir al Hospital Gregorio Marañón, el Vall d´Hebrón de Barcelona, La Fe de Valencia o el Virgen del Rocío de Sevilla. Centros asistenciales de primer nivel, junto a muchas decenas de otros más, que explican el éxito reciente de los oncólogos españoles. Ya que supieron atraer a muchos de sus colegas de todo el mundo al Congreso Europea de Oncología Médica, ESMO, que se celebró hace algunas semanas en Madrid, y al que asistieron más de23.000 especialistas de todos los continentes. Mención a la que añadió el presidente el altisimo nivel de los investigadores españoles que trabajan contra el cáncer, con algunos trabajos de liderazgo internacional. Junto a toda la comunidad científica española, que ya es la novena del mundo, la cuarta de Europa. Aunque, no obstante lamentó que todavía ocupe la posición 21 en generación de patentes.
También aprovecho Muñoz el acto para recordar las grandes cifras de la AECC. Con 300.000 socios, 52 delegaciones provinciales y presencia en 2.000 localidades, celebró especialmente poder destinar 40 millones de euros a 250 proyectos de investigación puntera en todo lo relacionado al cáncer. Una dotación que hace posible conceder cada año 12 millones de euros como soporte a 140 proyectos seleccionados, cuya entrega se hizo durante el acto del Museo de Prado, con previsión, además de poder subir dicha cantidad a 20 millones de euros en 2020. Una ayuda impresindible, en cálculos del presidente, si se recuerda que hay 700.000 ciudadanos que precisan apoyo psicológico por culpa del cáncer, y 250.000 con gran demanda social, de los que apenas un 10% ve satisfecha su demanda.
Pie de foto: Inés Entrecanales (AECC)
SE sumó a las palabras del presidente de la Asociación, su vice presidenta, Inés Entrecanales, quien, recalcó la necesidad de concienciación en la población para lograr evitar los cánceres que son prevenibles con buenas pautas de vida. Dentro de ese mensaje principal, refirió la mala impresión que recibió ella misma cuando encontró de manera fortuita un paquete vacío de tabaco en la mochila escolar de su hijo de 14 años. Una experiencia que le impactó más al saber que el adolescente conocía con todo detalle los peligros del tabaco para la salud, al ser parte de una familia militante contra las lacras del tabaquismo.
Completó el presidente Muñoz la parte discursiva de la AECC con una mención especial a dos de los destinatarios de las becas: la doctora Marisol Soengas, por su trabajo para anticiparse a las metástasis de melanoma, antes de que se produzca, y al doctor Mendez, quien también ha avanzado considerablemente en la prevención del cáncer de hígado, antes de que surja.
Pie de foto: El investigador Juan Carlos Aizpisúa (en el centro)
La mayor impronta científica corrió a cargo del investigador básico de prestigio internacional Juan Carlos Izpisúa.  Entre otras cosas, este científico explicó que su trabajo se dirige a detener el envejecimiento celular y que, aunque no se dedica directamente al cáncer, sus conclusiones tienen un gran potencial en oncología.
Como aspectos básicos de la enfermedad tumoral señaló las mutaciones genéticas que se producen en el núcleo y las mitocondrias de las células que se malignizan. Como ejemplo de ello, describió sus experimentos con ratones con la mutación NZB/BALB y las nuevas posibilidades que permite la tecnología CRISP/Cas9, Fundamentalmente habló de prevenir enfermedades de origen genético, especialmente monogénicas, de las que calculó que existen 10.000, sólo por mutaciones en el núcleo. También citó la implicación de MYBPC3 como explicación a la muerte súbita en personas aparentemente sanas y jóvenes, además de la Retinitis Pigmentosa (RP) que priva a los seres humanos, especialmente desde la infancia, de la propteína que permite la visión.
A modo de conclusión, Azpisúa afirmó que la investigación en cáncer tiene dos cuellos de botella: la eficacia y la seguridad. Pero al tiempo también abrió la puerta a trabajar con la epigenómica, que intenta comprender el diálogo de los genes con el entorno. Y para ello puso el ejemplo de los gemelos con el síndrome Hutchinson-Gilfird, ya que pueden ser tratados sin recurrir a la recombinación genómica.
Pie de foto: De Izda a Dcha: Inés Entrecanales (AECC), Alex Piris (ESMO), Nicolas Gaudin (IARC) (en pantalla grande), Joan Seoane (EACR), Nick Grant ( CRUCK) y Marta Puyol (AECC)
El encuentro contó con primeras figuras mundiales dentro del campo de la investigación en cáncer. Alex Piris, representante de la European Society for Medical Oncology (ESMO), recalcó la obligación de llevar los resultados de la investigación hasta todos los pacientes, mediante equipos multidisciplinares que atiendan sus necesidades, y siempre con estrategias de Networking. De igual forma, el director de Comunicación de la Agencia Internacional para la Investigación en Cáncer (IARC), Nicolas Gaudin, reflexionó sobre la aportación de la investigación en materia de prevención y de la importancia de trasladar los avances de investigación a todos los países. A lo que añadió el secretario general de la European Association Cancer Research (EACR), el doctor Joan Seoane, lo esencial que es compartir la investigación oncológica a nivel global. Algo que el CEO de la Unión para el Control Internacional del Cáncer (UICC), Cary Adams, consideró que solo puede hacerse con alianzas transnacionales. Un terreno en el que el director general de la Alianza Internacional para la Investigación en Cáncer del Reino Unido (CRUK), Nick Grant, afirmó que los investigadores españoles están muy bien situados en el panorama científico mundial.
Pie de foto: La oncóloga Alana Gros (Vall d´Hebrón) recibe su beca "Ideas Semilla" de la AECC
El momento cumbre de la ceremonia fue la entrega de ayudas. Recibió su beca "idea semilla" la oncóloga del Hospital Vall d´Hebrón de Barcelona, Alana Gros, al plantar la simiente de posteriores proyectos en oncología. Mérito similar fue el del investigador del Instituto de Investigación de Enfermedades Raras (IIER) del Instituto de Salud Carlos III (ISCiii), Ignacio Pérez de Castro Insúa, por sus trabajos en tumores poco frecuentes. Y, en tercer lugar, fue la inmunoterapia con la que trabaja la investigadora de la Fundación para la Investigación Biomédica del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, doctora Estela Paz Artal, la que también recibió una importante ayuda de la AECC para poder seguir investigando.
Prestaron su palabra y su presencia al acto la reina Letizia, presidenta de honor de la AECC y de la Fundación Científica AECC, y la secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación del MINECO, Carmen Vela. La primera de ellas animó al trabajo unido de investigadores, universidades y empresas, mientras que la segunda llamó a la movilización de todos para torcer las oscuras perspectivas que ofrecerá el cáncer para las personas en los próximos lustros.

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